Procesión 2018

Parroquia San Agustín, Bayamón

Los integrantes van dramatizando por toda la Urbanización de Lomas Verdes
en Bayamón el castigo  que sufrió Jesús camino a la Cruz

Con ecepción del año anterior que circunstancias fuera de mi control me impidieron cubrir la actividad, este año estuve presente dentro de ese campo tan dramático como lo es la agonía de Nuestro Señor Jesús camino a la crucifixión.

El grupo Sembradores de Fe de la Parroquia San Agustín en Bayamón se reúne prácticamente 6 meses antes para planificar, buscar los auspicios y delinear todo este encuentro que comienza con una Misa y luego las carrozas cuyos dueños donan de su tiempo, salen de la Iglesia con las escenas en las cuales Jesús se vio traicionado, condenado y torturado por el Imperio Romano en aquellos días.

Desde niños y niñas, jóvenes adultos, hombres y mujeres de mayor edad cubren sus cuerpos con la indumentaria de la época y recrean como artistas todo el panorama de un momento bíblico que seguimos y nos llega de cerca a nuestro espíritu para darnos cuenta que somos esencialmente un pueblo de gente buena, cristiana y con mucha Fe.

Muchos espectadores esperan ese momento culminante en las aceras, fuera del portón de la Parroquia, aguardando con calma el inicio de la Procesión, y mientras van saliendo, a través de unas bocinas enormes se va describiendo cada escena como si fuera un "trailer" de una película cinematográfica.

Para mí y en esto posiblemente discrepen de mí, pero lo cierto es que no importa la religión que profesemos; lo que es realmente decisivo sobre todo en momentos que se discuten tantos asuntos tan críticos aquí en Puerto Rico; valoro las cosas que nos unen. No la que nos separan. Por lo cual pienso que esto nos ayuda a entender que somos un pueblo que trata de levantarse y tener esperanza

Es importante destacar que todavía restan tareas en Bayamón que no tienen electricidad todavía (al menos eso supe días atrás), y pensar que bajo circunstancias tan apremiantes ese pueblo continúa una tradición de Fe y esperanza para mantener viva la esencia cristiana que nos une.

Por lo cual y sin mayor preámbulo comparto con ustedes las imágenes que tomé al cubrir esta actividad con la esperanza que las mismas contengan ese significado estético o fotográfico que nos ayude a darnos cuenta que no estamos solos y que hubo alguien que sufrió lo que humanamente no nos podemos imaginar.

Fotografías © 2018 José Carlo Burgos