Grafitti pintado por artista "Marshal Arts" debajo del puente de Hamburg-Dammtor en Alemania. Foto tomada por Frerk Meyer |
Frente a un MUNDO que sistemáticamente ha rechazado sus posturas, la administración Trump incrementa una política encadenada a grupos o sectores Neo nacionales intolerantes y racistas.
Algo que no tan solo debe espantar al más sensible sino que nos debe alertar sobre un modo de usurpar libertades con una administración en Casa Blanca extremadamente peligrosa.
Un estilo desafiante e insultante
El pasado 14 de julio del presente año, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump posó en una foto sentado en la silla de quien fue Primer Ministro de Inglaterra, Winston Churchill.
Eso provocó una portada en el periódico Daily Mirror http://thehill.com/homenews/media/397024-british-tabloid-hits-trump-for-sitting-in-churchills-chair-how-dare-you, cuyo título fue: "Cómo se atreve".
—Insulta nuestra nación, ataca nuestro sistema de salud nacional, humilla nuestra Reina, subestima nuestra relación especial y humilla a nuestro Primer Ministro con esa pose, sentado en la silla de Winston Churchill, expresó el artículo en su portada.
Es parte de un estilo, un patrón de conducta que se repite. Que es parte de su naturaleza. El problema es que arrastra a una nación con él.
Es como si te dieran en la cara. Como si se estuviesen riendo en cuartos oscuros mientras se cuecen leyes que matan y destruyen la vida de miles de seres humanos.
Se perpetúa la discriminación
Todos hemos sido testigos de los vídeos que se han convertido en virales sobre actos directos de discriminación racial.
Recientemente, una mujer de Puerto Rico fue atacada verbalmente por tener una camiseta que leía —Puerto Rico. Los oficiales a cargo no hicieron absolutamente nada y el individuo racista la insultó públicamente.
Además de un abogado en New York, insultando a empleadas por hablar español.
Podemos seguir dando ejemplos como lo de Charlottsville en donde murió un ser humano a manos de un acto de evidente racismo.
Ese empoderamiento o comportamiento nacional enfermo surge como parte de un discurso de estado que supuestamente les da ese derecho.
Ese discurso nace precisamente de un presidente que aun cuando pretenda esconderse debajo de sus "tweets"; la verdad es una: esencialmente es racista.
O peor aun, si verdaderamente no lo fuera, utiliza ese aspecto como escudo para que ese sector de la población continúe aplaudiendo sus políticas.
Punto final...
Si algo hemos aprendido con la historia es que ningún poder político es perenne ni permanente.
Obviamente se acerca noviembre, y es un punto crítico para esta administración presidencial. Pero no hay garantías.
En algún punto comenzará el derrumbe y creo que con la investigación sobre vínculos rusos, eso ya comenzó.
El rastro de la devastación humana, de relaciones y poderes mancillados sobre derechos humanos que ha manchado esta administración no tiene precedentes.
El momento de la verdad habrá de llegar y la justicia en algún momento se hará cargo de este grupo de gente que han usurpado los valores de una nación y la han colocado ante el mundo como un ente de discriminación y marginación colectiva.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.